domingo, 28 de noviembre de 2010

A un mes de la muerte de Kirchner

Como dice Dolina, si otros lo han dicho antes y mejor, para qué decirlo de nuevo chapuceramente.

Les dejo el video del canal oficial en Youtube de Casa Rosada.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Crecer de Golpe

Ante los hechos inevitables uno siente la necesidad imperiosa de hacer catarsis, de putear, de repetir hasta el cansancio que la vida es injusta, que una vida no vale nada.

Muletas y muletillas que usa a destajo para pasar rápido el mal trago, para apurar el momento, calmar el espíritu.

El paso del tiempo da la perspectiva de todo porque opera sobre el dolor, sobre el recuerdo, sobre la memoria suavizándolos, volviéndolos más humanos y más borrosos y hasta bellos, dando una perspectiva a veces impensada cada vez que se hace el ejercicio de memoria.

Cuatro veces en mi cincuentenaria vida he llorado sin consuelo pensando que se me terminaba el mundo, que no había por qué o por quién seguir.En 1974 por el general, en 1993 por mi viejo, Paco y en 2005 por mi vieja, Amalia que me habían dado la vida y en 2010 por alguien a quien no traté pero que VERDADERAMENTE ME CAMBIÓ LA VIDA Y NOS CAMBIÓ LA VIDA después de haber soportado personalmente más o menos dignamente la segunda década infame, el despido, la quiebra económica, la social y hasta la intelectual.

Nuestros profesores de Historia no se cansan de hablar, y hablarnos, de la perspectiva histórica, de la necesaria objetividad del (futuro) historiador en ciernes pero, por otro lado, no pueden dejar de reconocer que uno se enamora de su objeto de estudio, del tema de su investigación, de una época y hasta de algún personaje histórico defenestrado por alguna historiografía académica dominante supuestamente seria.

Lo que nadie puede enseñarte es a vivir pero con los cuatro por los que lloré y con algunas personas con las que uno se lleva por delante en su vida uno aprende rápidamente -y algunas veces a los golpes- que siempre hay razones por las que seguir, sueños compartidos que alcanzar, metas a las que éticamente aspirar (y concretar).

Te dan "ejemplos tontos" en el día a día que no aparecerán en ningún futuro "Tratado de vida cotidiana en el siglo XXI", te "desmelonean" como dice un amigo porque te obligan a pensar, a reflexionar, a mirar viendo pero, centralmente, te revalorizan como persona, porque te inculcan más noes que síes, porque te enseñan a valorar lo poco (o mucho) que tenés, porque te incitan a pedir y exigir Justicia con mayúsculas, a comprender que no te salvás solo, que sólo la solidaridad total puede hacer de una persona un ser humano valioso.

Argentinos al fin, en los oscuros años del menemato soñábamos con un hombre providencial que fuera, como dice el amigo Viglietti, BRÚJULA O FLECHA que mostrara por dónde ir para recuperar nuestro sentimiento y sentido nacional y popular. Esperábamos sin grandes perspectivas, sin ganas, mirando Gran Hermano y votando al menos hijo de puta, al que te iba a joder menos.

Pero esperábamos.

Tuvimos muertos en Corrientes, colas en las embajadas, en los Registros civiles y los juzgados buscando "los papeles" que iban a demostrar que no éramos unos sudacas de cuarta sino de primera aptos para laborar en las madres patrias de nuestros abuelos.

Y, de paso, participábamos por algún amigo, pariente, conocido o desconocido el 22 de cada mes de misas por los emigrantes en la Parroquia San Carlos mientras los sesudos científicos sociales nos hablaban del desapego, del consenso y de la anomia de la sociedad argentina desde las páginas del diario del multimedio local.

Tuvimos un blindaje que, según nos decían marianito y bernardito, nos ponía otra vez en carrera y un presidente al que voté para terminar con el asco menemista -y al que un ex integrante del Grupo de los 8 daba un reaseguro más o menos peruca- permitía que su hijo cerrara el Cerro Catedral para esquiar con Shakira mientras repetía: "Qué lindo es dar buenas noticias", sobornaba a doctos senadores para que aquellos que tenían una indecente ocupación pudieran gozar de las libertades del libre mercado y les rebajaba el sueldo a jubilados y empleados públicos que la ministra de trabajo -de doble apellido y pasado en la gloriosa JP- vendía como un "ahorro" que hasta recibió el reclamo de la conductora de los almuerzos mediáticos.

En el inventario no podía faltar la corte de los supremos -herencia menemista que capitaneaba un ex jefe de polícia durante la dictadura- que convalidaba lo que se le presentara con tal que no violara el 1 a 1 y los negocios residuales que había dejado sin abrochar el gobierno anterior.

Y esperábamos. Aunque no podría jurar que contra toda esperanza como sabiamente aconsejaba el cura Hugo Segovia.

34 muertos para inaugurar el verano 2001-2002 dieron paso a 5 presidentes interinos que administraron el fin del experimento social, político y económico privilegiado del neoliberalismo. Otras 2 muertes pusieron fecha de salida al que había sido candidato a presidente perdidoso en 1999 y que se había hecho del gobierno con la complicidad de los legisladores cuyo jefe nominal huyó en helicóptero desde la Casa Rosada.

Faltaban medicamentos que no podían conseguirse en los clubes de trueque y buscábamos sobrevivir esperando que el vaticinio de la Universidad de Londres estuviera equivocado y las asambleas populares no se convirtieran en el Soviet de Petrogrado ni el dólar llegara a $10 como prolijamente nos operaba la Revista Noticias tratando de presionar al Poder Ejecutivo para que apurara la ley de Patrimonio Cultural (ley 25750) que salvaría a Clarín y socializaría la deuda externa del grupo. Mientras tanto, esperábamos.

Finalmente, otro 25 de mayo, pero ahora de otro siglo, un desgarbado gobernador bendecido a regañadientes y por descarte por los caciques del PJ y elegido con menos porcentaje que Illia en 1963, aparecía haciendo malabares con el bastón de mando presidencial.

El resto de la Historia es conocida y algunos millones comenzamos imperceptiblemente, de a poco y con desconfianza decreciente, a darnos cuenta de que la espera había terminado y que una Nueva Canción puede y debe ser escrita porque se corrieron los límites de la cancha y las reglas de juego se están reescribiendo.

Aunque hoy el desgarbado gobernador por fin descanse en su lugar en el mundo sin haber firmado algo de que avergonzarse y convertido en el Presidente del NUNCA MENOS.

jueves, 28 de octubre de 2010

Unas palabras para la "gente decente"

Ayer nos despertamos con una extraña noticia: había muerto Néstor Kirchner, así "de repente" diría alguien. Como si la muerte anunciada fuera mejor, como si hubiera mejores y peores maneras de morirse. Poéticamente sí, me dirán algunos, y tendrán razón, pero la muerte y yo nos llevamos de patadas desde hace más de diez años.

También es cierto que en nuestro país ningún muerto es malo, ni siquiera aquel a quien se ha denigrado en vida. Como dice Raúl Degrossi: "nos dijeron que era un hijo de puta" y de tanto repetirlo los calificativos terminan por calar, por filtrarse en el inconciente, pero resultó que en este caso no fue así porque cientos de miles lo están desmintiendo en la Plaza de Mayo, a pleno rayo de sol y con 25 grados. De todos modos eso parece no conformar a la "gente decente" a la que hay que oír decir que los negros de mierda no quieren trabajar y por eso se les ha dado tres días de luto, como si lo fueran a usar para llorar a su líder.

Admito que soy una completa advenediza y mis amigos podrán corroborar lo que digo: no voté a Néstor, ni a Cristina para Presidente. Y sin embargo, hoy, después de haber estado llorando desde la madrugada, imaginando la pérdida de ella, que tendrá que habituarse a no volver a cruzar miradas cómplices y llenas de cariño con el hombre con el que compartío toda su vida, del que ya no recibirá esos enormes y nada disimulados abrazos; lo único que puedo decir es que estoy orgullosa de tenerla  ocupando el lugar que ocupa, que me siento orgullosa de ver a un montón de jóvenes veinteañeros haciendo suyo un ideal y creyendo que se puede.

Todos los muertos son buenos, pero este en especial algo debe haber hecho para que Latinoamérica lo llore y lo respete.

¡Fuerza Cristina y que los muchachos de La Nación, Clarín y El País de España sigan revolcándose en su mugre! (aunque la historieta la haya robado de este último)

Pd: y si quieren leer algo más coherente pásense por el blog de Brieger que colgó las palabras de Mempo Giardinelli aparecidas en Página 12.




lunes, 30 de agosto de 2010

LA INSEGURIDAD

Capaz que después de postear este artículo, bajo hasta la panadería y pasa un motochorro, me afana "nada" (que es toda la plata que tengo) y más tarde, saldrá diez vces en cada noticiero de los canales marplatenses, pasando por Crónica y haciendo creer a mi familia que lo mira por TV que "casi" me "fusilaron" para robarme 30 pesos (que ni a eso llegarían). No digo que no existan los robos y los asesinatos y que no deban ser condenados, pero este uso de palabras de tan enorme significado y concepto, como el que creo muy mal uso de la palabra "fusilado" o el paquete con combo de oferta y todo con que se usa "inseguridad", digo, este uso manipulador de la realidad no hace más que condenarnos a la peor de todas las inseguridades: una insensatez maniquea, maníaca, con rasgos de ideología nazi que pulula por todas partes, porque, si prestamos atención en la calle, en la casa, o donde sea, vamos a encontrar que se sigue teniendo cara de chorro, el negrito sigue siéndolo y no por morocho, y da la casualidad que siempre es el sospechoso y pobre a fulanito le robaron todo con tantos años de sacrificio, que hizo todo laburando (y fulanito tiene una empresa capitalista en la que hizo todo robando a los trabajadores su parte del producto, no hace falta leer mucho a Marx y creeer que todo es teoría, hace falta mirar la realidad).
Disculpen, me levanté con necesidad de escribir y pensar, o al revés, y como no hace mucho que me desperté puede que esto esté incompleto o no se entienda. Me voy porque dejé la ventana abierta y tengo miedo...

Un mapa de la inseguridad con datos poco seguros

La inseguridad fue el tema de la campaña de Francisco de Narváez y su principal propuesta para combatirla fue un mapa del delito. Hace más de un año que ese sistema funciona, pero es imposible sacar conclusiones útiles de sus resultados.

 Por Raúl Kollmann
Jorge D’Onofrio, titular de la Comisión de Seguridad del Senado bonaerense, duda que el Mapa de la Inseguridad que impulsó Francisco de Narváez durante su campaña aporte demasiado a la resolución de los problemas de delito que tiene la provincia de Buenos Aires. D’Onofrio acaba de romper con De Narváez justamente porque “el trabajo que se hace no es serio y en las siete reuniones que tuvimos los legisladores bonaerenses con él nunca discutimos medidas reales contra la inseguridad”. En plena campaña electoral, en diciembre de 2008, Francisco de Narváez presentó con mucho ruido el Mapa de la Inseguridad online. El objetivo, según lo señalado por el candidato, era “que ante la censura ejercida por el Gobierno sobre los datos oficiales, podamos empezar a construir una estadística de la gente y así sepamos qué delitos nos están sucediendo, esto obligará a las autoridades a no hacerse los distraídos y nos ayudará a nosotros a cuidarnos todavía un poco más”.
El mapa parece no tener ningún efecto en materia de seguridad, a tal punto que nadie les presta atención a las denuncias. Por ejemplo, numerosas personas –seguramente con identidades falsas– aparecen haciendo denuncias truchas de robos y hasta violaciones en los alrededores de la propia casa de Francisco de Narváez, en el Barrio Parque de la Capital Federal, y también en las cuadras que rodean la vivienda de Mauricio Macri.
En otra entrada, un hombre denuncia que en tal supermercado –menciona la cadena– trataron de cobrarle 38 pesos un pollo, “lo que constituye un robo”. “Esos empresarios deben ser controlados”, argumenta el denunciante. Los hombres de De Narváez defienden el Mapa: “Es cierto que puede haber denuncias que no sean verdaderas, pero nosotros registramos cuatro intentos de robo de vehículos en el mismo lugar donde terminaron disparándole a Fernando Cáceres. Lo mismo con Renata Toscano, asesinada en Wilde. También teníamos siete tentativas de robo en el mismo lugar”.
De Narváez presentó el mapa como “una herramienta poderosa para saber qué zonas son más peligrosas y para que las autoridades actúen en consecuencia”. Sin embargo, en el mapa se mezclan los delitos, algunas denuncias aparecen repetidas seis y hasta siete veces –el robo de una moto en la calle Caxaraville al 6700 de Wilde–, con fechas distintas, y en muchísimos casos el texto del denunciante tiene un idioma con marcado acento policial: “Tres masculinos ingresaron al local, reduciendo al personal”. El sitio no tiene el menor filtro y se pueden leer entradas desopilantes, que no tienen nada que ver con el objetivo declarado de servir como un instrumento para combatir la inseguridad:
- Alguien, que no dice su nombre, denuncia en la calle Liniers de Tigre, que “leí en el diario que mataron a un joven de 18 años acá en Tigre”.
- El 14 de junio de este año, una mujer denuncia: “Me encontraba circulando positivamente (sic) por los pasillos del Palacio Municipal de La Plata cuando una señorita de mal aspecto me robó los anteojos de sol”.
- Como robo figura la denuncia, anónima, en Ituzaingó: “Se aprovechan de la gente necesitada y les hacen sacar créditos de 4000 pesos, dándoles sólo 800”. En el ingreso inmediato también figura como robo “dos negros en moto me robaron la cartera”. Todo se mezcla con todo, lo que impide hacer análisis serios y sacar conclusiones.
- Parece haber alguna cargada o crítica encubierta, cuando un “ciudadano argentino” denuncia en Capital Federal, cerquita del domicilio de De Narváez, que “en este lugar roban y violan los intereses que alguna vez le confiamos a este grupo de personas. Ahora no importa de qué bando son, el grupo hace lo que quiere. Aparte el grupo se pelea por intereses personales, a ver quién roba más”. En realidad, ni siquiera está claro de qué grupo se trata.
- En Almagro se denunció que “a mi abuelita Elba, ayer por la tarde, le robaron su abanico que era del siglo XIX. Encima el chorro con la remera de Boca puesta, cuando se daba a la fuga, por el calor que hacía, se iba apantallando su cara”. Tampoco queda claro si es una cargada o un hecho real.
- “Al llegar a la caja del supermercado (pone el nombre de la cadena) pretendieron cobrarme 38 pesos un pollo. Un robo. Estos empresarios tienen que ser controlados.”
Jorge D’Onofrio es el actual presidente de la Comisión de Seguridad del Senado bonaerense. Rompió hace una semana con De Narváez formando un bloque unipersonal: Unidad Peronista.
D’Onofrio asegura que su ruptura se produjo –según afirmó a este diario– “porque nunca se hizo ningún trabajo serio en materia de seguridad. Desde la victoria del 28 de junio de 2009, hicimos siete reuniones de todos los legisladores bonaerenses con De Narváez. Nunca se habló en serio del tema de la inseguridad, pese a que fue el centro de la campaña electoral. De Narváez decía una y otra vez ‘la seguridad se hace’ y otras consignas por el estilo. El Mapa de la Inseguridad fue una de las tantas cosas hechas sin la menor seriedad. Fue una creación de Eugenio Burzaco, que en 2008 se había peleado con Mauricio Macri. Después Burzaco se fue y ahora está otra vez con Macri y es el jefe de la Metropolitana. Esto del mapa lo instrumentaron con el publicista Ramiro Agulla. Cualquiera que entienda algo en materia de inseguridad, sabe que el Mapa del Delito es algo que tienen que hacer las autoridades, con mucho detalle, y no debe estar a disposición del público, porque es un instrumento de inteligencia contra el delito. Le digo más, hoy en día tienen mapa del delito la Policía Federal, la Policía Bonaerense y la Procuración. De manera que aquello fue un acto de publicidad, nada más”.
Martín Verrier, coordinador del equipo técnico de seguridad de De Narváez, rechaza las críticas. “Es una herramienta. Está en Chicago, en Nueva York. Es cierto que hay alguno que otro caso que posiblemente no sea verdad. Pero nosotros controlamos el IP para saber si llegan denuncias siempre de la misma computadora. También evitamos los casos de xenofobia. Es una herramienta que se pone a disposición de las autoridades y de la gente. Es que faltan estadísticas oficiales. Entre a la página de Internet del Ministerio de Seguridad y verá que las estadísticas no están”, le dijo Verrier a Página/12.
–La Procuración Bonaerense acaba de publicar las estadísticas del delito en la provincia de Buenos Aires.
–Sí, pero no está desagregado por zona.
–Pero el mapa tampoco sirve para eso. Por ejemplo, hay días enteros en que no se registra ni una sola denuncia ni un solo robo.
–Mire, usted sabe que en el delito existe cifra blanca, que son los casos denunciados oficialmente, y cifra negra, los que no están denunciados. Nosotros publicamos las denuncias de la gente. Fíjese que registramos delitos previos en los lugares donde balearon a Cáceres y mataron a Toscano.
–Eso también lo tenían en el Ministerio de Seguridad y en la Procuración.
–Se ve que no lo aprovechan. En Chicago y en Nueva York los mapas del delito son públicos. Y, además, se hacen campañas para indicarle a la gente cómo evitar los delitos.
D’Onofrio tiene otra mirada:
- El mapa nunca sirvió para sacar ninguna conclusión.
- No se verificaron las denuncias.
- No se hizo ningún trabajo con lo que surgía del mapa.
- Está probada la existencia de denuncias truchas. En algunos casos, uno se da cuenta a simple vista.
El punto que llevó a la ruptura de D’Onofrio con De Narváez fue la inclusión de su nombre en una solicitada en la que se pidió la declaración de la emergencia nacional en material de seguridad. “Unos días antes, el gobernador Daniel Scioli convocó a la oposición al Consejo de Seguridad. Nosotros, por supuesto, concurrimos. Le propusimos varias medidas, entre ellas que se amplíe el Consejo a todos los diputados. El gobernador escuchó, aprobó parte de lo que planteamos, se mantiene un buen diálogo, pero al mismo tiempo, sin ninguna consulta, la línea de gerentes de la política que tiene De Narváez saca una solicitada pidiendo la emergencia en materia de seguridad. No autoricé en ningún momento la inclusión de mi firma y, además, era totalmente contradictorio con lo que estábamos haciendo.”
“El problema con De Narváez –sostiene D’Onofrio– es ése: impone una línea de gerentes que se pone por encima de la política. Gerentes que provienen de su fundación y que nunca pisaron una comisaría o un juzgado. Y por eso, las cosas son como el mapa: cartón pintado. Nosotros teníamos varias posturas que, como le digo, nunca se discutieron con seriedad.
Por ejemplo, para nosotros, un problema clave es el robo de autos. Propusimos que sea obligatorio que todos los autos tengan rastreador satelital, lo que se conoce comúnmente como Lo Jack. Así como los autos tienen que tener seguro obligatorio contra terceros, tienen que tener rastreador satelital. Hoy, vale 25 pesos por mes. Si se aplicara en forma obligatoria, el costo bajaría muchísimo. Y la reducción en los robos sería sustancial. Por otra parte, cuando roban un auto para cortarlo minutos después, le tienen que sacar la batería. En ese mismo momento, aunque no haya denuncia, se determina exactamente dónde está el vehículo.”
Otro punto que según D’Onofrio no fue tenido en cuenta estaba referido a un sistema de microdots, que identifica todas las piezas de un coche. Es decir que se llega a un desarmadero y con un lector, como si fuera un código de barras, se sabe enseguida a qué auto correspondió la pieza y si su origen es legal o ilegal.
“En los ocho meses transcurridos desde que asumimos el 10 de diciembre –señala D’Onofrio–, presentamos 35 proyectos en materia de seguridad. Con De Narváez y su equipo nunca discutimos ninguno. No se enteró. En el fondo –concluye–, lo que ocurrió es que De Narváez se fue de la provincia para coquetear con la idea de ser presidente. Por ejemplo, no apoyó la Asignación Universal por Hijo argumentando que era un subsidio. Nosotros le insistíamos en que había que apoyarla y redoblar la apuesta, exigir más. Es que significa sacar chicos de la marginalidad. Es uno de los grandes temas de la inseguridad: no puede ser que a cinco minutos de la Capital Federal haya barrios a los que la policía no puede entrar. Ahora De Narváez aparece más preocupado por sacarse alguna foto con (Julio) Cobos. Por eso le digo que es todo publicidad, marketing. Como en el Mapa de la Inseguridad. ¿A usted le parece que la víctima de una violación va a publicar por internet que la violaron? ¿No se tiene que manejar eso con discreción y eficiencia para agarrar al violador?”

Fuente: Página 12 del 30 de agosto de 2010

Papel Prensa o el metarrelato de "Somos Derechos y Humanos"

Podría hacer alarde de una erudición de la que carezco y remitir a una interminable bibliografía sobre aquello que se entiende como metarrelato, criatura construida por la posmodernidad para oponérsele, pero que en su más básica y pedestre definición se limita a ser una explicación total y legitimadora de los grandes temas de la sociedad.

El martes 24 de agosto de 2010, Cristina Fernández presentó el informe de trescientas páginas, "Papel Prensa - La Verdad", que basado en más de 20 mil fojas de expedientes, documentos y archivos da cuenta de los avatares del traspaso de las acciones de David Graiver a los responsables de La Nación, Clarín y La Razón en el año 1977.

En este discurso de 72 minutos, la presidenta hizo un recorrido no sólo por la composición específica de los tipos accionarios que se estaban manejando, sino también, y mucho más esclarecedor para quienes no están dispuestos a leer el informe (cosa que es aconsejable, siempre), del contexto histórico, político y económico en el que se vivía toda esta movida aparentemente legal. Este discurso inauguró un nuevo relato de lo que hasta ahora se había sostenido acerca de cómo los dos diarios más grandes de nuestro país tomaron el control de la planta de celulosa y con ella del insumo esencial que terminaría por eliminar a los competidores más chicos al obligarlos a acceder a él a precios diferenciales.

Un nuevo relato digo y no la verdad, porque como en todo devenir humano la Verdad con mayúsculas y sin fisuras es una quimera sumamente peligrosa. Sin embargo, para quienes seguimos por puro placer masoquista los acontecimientos a través de las páginas de La Nación, vemos que tanto sus editorialistas estrellas (Morales Solá - Grondona) como el resto del staff se aferran a un metarrelato en el que la retórica no sólo es irónica y trágica sino ofensiva. "Fue la imagen patética de un ejército en retirada, disparando al aire los últimos proyectiles de una guerra perdida." dice Morales Solá con una pluma cercana a su compañero filoheleno, el día de hoy, refiriéndose a la grabación que hizo pública Tiempo Argentino en la que Isidoro Gravier admite que Clarín y La Nación "afanaron" a su familia y que apareció como contraposición inmediata a la soliciatada que publicaron estos diarios en la que Graiver refuta los dichos de la presidenta y está dirigida a su sobrina María Sol.

Mariano Grondona, fiel a su amor por demostrar sus conocimientos de la antigüedad , compara las Guerras Médicas (de cuya existencia sólo nos queda la versión griega) con la "guerra civil" que enfrentó a Montoneros con el Ejército, para afirmar la crisis del relato setentista que ha sido el dominante en todo el tiempo transcurrido desde la presidencia de Néstor Kirchner. Según él, este relato de los vencidos, paradoja que instaura Antonio Gramsci desde la prisión y que los convierte en los reinventores del relato de los vencedores, es la que ha permitido a Montoneros (a los que tácitamente adhiere al kirchnerismo y sus adeptos) dar vuelta la Verdad de los setenta. De paso, y técnicamente, los militares presos que aún esperan sentencia son presos políticos.

Pero la cosa todavía es más grave. En ese ansia desmedida de no intentar una síntesis superadora entre el relato setentista y el antisetentista (es decir, en palabras de Duhalde, gobernar para los que quieren a Videla y para los que no lo quieren), sino de empujar al límite de lo tolerable todo los supuestos establecidos, los Kirchner han encontrado aliados incondicionales: las Madres de Plaza de Mayo. "Hay, así, dos capítulos en la historia de las Madres, uno admirable y otro nebuloso porque algunas de ellas podrían haber recibido cuantiosas prebendas a cambio de su adhesión."

 El largo discurso de Cristina Kirchner del último martes dejó perplejos a los observadores por el contraste entre sus premisas y sus conclusiones. "¿Qué podría hacer entonces Cristina?", se pregunta nuestro amigo aqueo (¿será por eso que siempre estuve del lado de los troyanos?), "no haber pronunciado el discurso". ¿Y por qué? Porque no cumplió con lo que temían los más agoreros: la intervención de la Planta de Papel Prensa, porque prefirió dar curso a la Justicia en este caso e intentar que los legisladores declaren de interés público el abastecimiento de celulosa para papel periódico. Nada más y nada menos.

Morales Solá sentencia: El ritmo de la ofensiva kirchnerista contra la prensa depende ahora de los jueces. La caja que abrió el Gobierno podría desatar otras guerras. David Graiver controló fondos de los Montoneros y ésta fue la peor consecuencia para su familia después de su muerte. ¿Cómo se financiaron los Montoneros? ¿A quiénes solventaron con sus recursos para que los ayudaran? ¿Cuáles eran las formas de extorsionar de esos jefes guerrilleros? ¿Dónde fueron a parar los millones de dólares que recaudaron mediante secuestros? ¿Acaso una investigación cabal y seria del pasado no llevaría hasta el propio Perón, si se hurgara en los orígenes de la criminal y paraestatal Triple A?

Claro que la caja que se abrió podría desatar otras guerras, podría pedir explicaciones del origen biológico de los hijos de la señora de Noble, podría preguntar por qué algunos silencios son un grito atronador que no es fácil de evitar. Podría preguntar... el problema será si estamos dispuestos a hacernos cargo de esas respuestas. Si es cierto que "desde el final del peronismo setentista, en manos de Isabel Perón, no se veía en democracia una estirpe de oficialistas tan primitiva y cerril." será mejor entonces que estemos preparados para decidir de qué lado queremos quedar parados cuando las cosas vuelvan a su cauce natural, cuando el relato aquietador de conciencias vuelva a tomar impulso y nada de todo esto se haya dicho.

Entonces, y sólo entonces, quizá aparezca algún joven inquisidor que nos interrogará preguntando por qué tomamos las decisiones que tomamos, por qué en el momento crucial de nuestra existencia no elegimos ir hasta el fondo. Si eso ocurre y lo dejamos pasar, de nuevo volveremos a ser derechos y humanos y de nada habrá servido bajar el cuadro de Videla, de nada habrá servido enjuiciarlo y, con un poco de suerte, encarcelarlo. De nada habrá servido cuestionar nuestro pasado y encararnos con nuestros muertos, porque no habrá sido más que un diletante ejercicio del peor gusto.


Informe "Papel Prensa, la Verdad" en Casa Rosada (Cadena nacional de Cristina F. Kirchner el 24/08/2010) from Cesar Zamboni on Vimeo.

domingo, 22 de agosto de 2010

TESTIMONIOS EN EL JUICIO ORAL POR LA MASACRE DE MARGARITA BELÉN

 

Entierros clandestinos y desapariciones

Una empleada del cementerio de Resistencia relató cómo, en la madrugada del 15 de diciembre de 1976, sepultaron diez cuerpos sin identificar. Dijo que recibieron presiones y que una compañera suya desapareció después.

 Por Marcos Salomón
Una empleada municipal llamada Norma Godoy de Arias reveló en el juicio por la masacre de Margarita Belén, en el Chaco, que una compañera suya que trabajaba en el cementerio de Resistencia y su esposo permanecen desaparecidos desde poco tiempo después de que las víctimas de la masacre fueran enterradas a la madrugada en ese lugar.
La declaración se produjo en este contexto: en principio, la mujer estaba visiblemente nerviosa, pero a la vez clara cada vez que tenía que responder preguntas. Relató que el 15 de diciembre de 1976 tuvo que asentar en los libros que diez cuerpos fueron enterrados en horas de la madrugada. “No es común, siempre los servicios son en el horario de atención que comienza después de las 6. Lo hicieron a la madrugada. Lo obligaron al capataz Centurión (fallecido) a cavar”, narró. Fue el mismo Centurión el que confeccionó los papeles de donde Godoy copió lo que iba asentado en los libros, con varios NN. El mismo capataz le contó a Norma que enterraron cuerpos en bolsas y en cajones cerrados. “A los que estaban en bolsas, los enterraron así nomás, no tenían ni una cruz para identificarlos”, contó la mujer, que de todas maneras aclaró que a las administrativas –como su caso– no las dejaban acercarse a esa parte del San Francisco Solano.
Lo que vino después fue un calvario: “Estábamos bajo amenazas de militares. Vos nos digas nada porque vas a tener problemas o te va a pasar como a ellos, me dijo Centurión”, relató. Según Norma, los trabajadores eran perseguidos hasta sus domicilios y llegaron a colocar en la administración del cementerio a un militar: “El Negro” Juárez, quien controlaba todo el movimiento.
El cuadro se completó con la desaparición de su compañera Carmen “Pelusa” Ferreira. Con esa presión, Godoy renunció como administrativa del cementerio en 1981, para ser reincorporada a la comuna de Resistencia hace cinco años. Antes de renunciar, “se entregaron cuerpos a los familiares, o nosotros suponíamos que lo eran. Muchos otros siguen ahí” en el cementerio, finalizó.
Abrieron la ronda de testigos del jueves los ex presos políticos Julio Coscio y Jorge “Mencho” Campos, ambos militantes de la JP Regional 4ª y con similares lecturas de la masacre de Margarita Belén: se aplicó la ley de fugas, ante un supuesto enfrentamiento imposible de que se produjera.
La declaración de Coscio, acompañada por una barra formoseña, molestó en varias oportunidades a los imputados, pero, principalmente a sus familiares. Las esposas de Aldo Martínez Segón y Horacio Losito, sentadas juntas en algunos momentos, realizaban exclamaciones.
Mencho, que nerviosamente se frotaba la mano en la pierna izquierda, contó: “Entre los imputados está sentado Aldo Martínez Segón, que fue mi abogado defensor cuando en 1979 me sometieron a Consejo de Guerra”.
Primera reacción: sorpresa. Acto seguido: risas –público, abogados, jueces y hasta los imputados– ante la ironía del destino. El diminuto (físicamente) Martínez Segón, incómodo, trataba de ocultarse en segunda fila, tras la inmensa humanidad de Luis Alberto Patetta, otro de los imputados.
Campos recordó que en 1979, tras recobrar por unos días la libertad, fue nuevamente detenido y sometido a Consejo de Guerra en el Regimiento de La Liguaria. Recién recuperó su libertad en 1983, ya con Raúl Alfonsín como presidente.

Fuente: Página 12, 21 de agosto de 2010

jueves, 22 de julio de 2010

Los premios de la SIP

En estos días en que uno anda muy "amiguero", saludando incluso a gente que hace más de quince años que no ve pero que le deja notitas en el Face, pasaron cosas importantes, por lo menos para la gente que trabaja en La Nación y Clarín. 

Me refiero por supuesto, a los premios otorgados por la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa). En una nota del de hoy nos enteramos de que NIK, el dibujante estrella del diario de los Mitre, fue galardonado por la prestigiosa entidad con el "Premio a la Excelencia en Periodismo 2010, en la categoría Caricatura, por su serie sobre los ataques del gobierno a la libertad de prensa".

Cabe preguntarnos entonces, ¿cómo alguien que denuncia los ataques a la libertad de prensa y las leyes mordazas del gobierno fascista de Cristina Fernández, ha podido publicar su serie sin ningún problema todos los días en uno de los diarios más leído del país?
Claro que no hay que olvidar que la SIP es la misma entidad mantuvo en un limbo la cuestión del golpe de estado en Honduras, y un año después recomienda a Porfirio Lobo que se deben hacer más esfuerzos por esclarecer estos los crímenes de los nueve periodistas ocurridos en ese lapso; que es la misma que se rasga las vestiduras por las violaciones a la libertad de prensa que se cometen en los países con regímente "populistas" de América Latina y que en su Reunión de Medio año (19 al 22 de marzo de 2010) no dudó en atacar de frente,  en su segunda resolución sobre Argentina (hay tres), a la Ley de Medios, aquí sus conclusiones:

LA REUNION DE MEDIO AÑO DE LA SIP RESUELVE

Instar al Gobierno argentino a respetar las resoluciones judiciales vigentes que suspenden la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, en una clara muestra del reconocimiento a la división de poderes del Estado

Exhortar al Poder Ejecutivo a no avanzar en la implementación y aplicación de una norma que se haya suspendida por vicios en su sanción y por afectar en su contenido derechos constitucionales como la libertad de expresión, el derecho de propiedad, la igualdad ante la ley y la libertad de elección de los consumidores

Solicitar al Congreso argentino la modificación de la citada ley, cuestionada por la Justicia, promoviendo el debate de una normativa de medios audiovisuales que incluya un análisis profundo de sus contenidos, con el aporte de todos los sectores involucrados, y que busque articular armónicamente valores centrales de la democracia, como la libertad de expresión; la independencia, sustentabilidad y diversidad de los medios y la no discrecionalidad del poder político en su aplicación.

Si  faltaba algo, en esa misma reunión se le otorgó el Gran Premio Chapultepec 2010 a José Miguel Vivanco (presidente de la Human Rights Watch) por “su destacada labor en defensa de la libertad de expresión”. Si le creyéramos al autor de El verdadero expendiente de Human Rights Watch, Vivanco está seriamente comprometido con el golpe de Estado perpetrado contra Hugo Chávez en 2004 y antes de eso se lo asoció a funciones de inteligencia para el gobierno de Augusto Pinochet. Si dos más dos siempre fueran cuatro, habría que agregar que el presidente del "Proyecto Chapultepec", dentro de la SIP, es el señor Bartolomé Mitre del dirio argentino La Nación.

Llegado a este punto, ¿habrá que felicitar al señor Nik por haber recibido de tan honrosas manos un reconocimiento? ¿Le preguntamos a Gaturro?

miércoles, 21 de julio de 2010

Y seguimos...

A los gays no, a Astiz sí

Leemos en la edición digital del diario Página/12:
 

El director del registro civil de Concordia, Alberto Arias, ratificó su rechazo a casar personas del mismo sexo, aunque se manifestó dispuesto a oficiar una eventual boda de Alfredo Astiz, responsable de delitos de lesa humanidad durante la dictadura.

“Y sí, ¿por qué no lo voy a casar al pobre hombre? ¿Hasta cuándo vamos a estar acusando, hasta cuándo?”, dijo el director del Registro Civil de Concordia, en referencia a Astiz. Arias, al defender su postura contraria al matrimonio igualitario, dijo que “el pensamiento único es propio de los regímenes nazis y fascistas”.
Asimismo, sostuvo que “si no hay nadie que lo haga, lo haré yo, porque la oficina debe actuar”, ante la posibilidad de que deba oficiar un casamiento entre personas del mismo sexo.

En declaraciones a Radio La Voz de Paraná, Arias hizo una curiosa interpretación de la Carta Magna: consideró que “el artículo 19 de la Constitución nacional indica que nadie puede ser impedido de lo que la ley no prohíbe”, al explicar su planteo de objeción de conciencia al matrimonio igualitario. “En la República rige el principio de legalidad. Si no está prohibida la objeción de conciencia, está permitida. El principio en Argentina es de libertad”, argumentó el funcionario, aunque en realidad lo que debe hacer un funcionario es cumplir con la ley, en este caso de matrimonio igualitario.

El sábado pasado, Arias había reconocido que en su condición de abogado canónico no está dispuesto a casar a parejas homosexuales.

lunes, 5 de julio de 2010

Podría haber sido un cuento de Dolina pero fue el New York Times

Para alguien como yo que se precia de disfrutar del fútbol (aunque casi de todo deporte), de apasionarse con cada jugada y con cada posibilidad, toda derrota es lamentable y lleva su tiempo asimilarla. Sin embargo, hay derrotas y derrotas, y la del sábado ante Alemania (aunque abultada en su marcador) supo amarga no por ese motivo, sino por lo que se estaba jugando fuera de la cancha, por aquellos que hacían fuerza para que la Selección perdiera nada más que para ver caer de nuevo a Maradona y poder pegarle de paso al gobierno (porque ya se sabe que toda desgracia en cualquier rincón de este planeta la culpa es del gobierno kirchnerista).

Admito, y para los que me conocen no es novedad, que seré la única persona sobre la faz de la Tierra que considera que Messi no es Maradona y no lo será nunca porque no tiene pasión (sí, me pueden putear, total es gratis y soy mujer). Pero seamos francos, ya que es de madrugada, es triste tener al mejor jugador del mundo y que nadie se entere.

Saldada esa cuestión, de nuevo vuelvo a sentir lo que venía diciendo algunos posteos atrás, aunque con respecto a cosas más serias (el fútbol es serio, eso lo sabemos todos pero al lado de crímenes de lesa humanidad... bueno, no tanto): algo está cambiando en nuestra manera de ver las cosas. No sé si para mejor o para peor, pero está cambiando. El gran pueblo argentino que palpó la entrega de sus ídolos entendió que esta historia merecía un final feliz y por eso fue a buscar a los muchachos a Ezeiza . Por esa razón quiere que Diego se quede, porque tiene memoria y recuerda lo que era la albiceleste hace unos meses atrás: casi un rejuntado de solteros y casados sin alma y sin ambiciones.

Cualquiera habría esperado lo que la policía esperaba: miles de personas reunidas para abuchear a los perdedores. En cambio nada de eso ocurrió.Y hasta los jugadores lloraron sorprendidos por el recibimiento de su gente. ¿Será que estamos entendiendo que a veces se gana o se pierde pero lo que importa no es competir, sino lo que entregamos en esa competición?

Quizá un ángel de alas mugrientas, a pesar de todo, esté repartiendo sueños más allá de los límites del Barrio de Flores y la historia no haya hecho más que empezar. El 2011 está cerca y la Jabulani gracias a dios, muy lejos.

Ah, me olvidaba, la nota que acompaña esta reflexión es mi versión en español del texto del New York Times.

Sobre Fútbol

Apostando por el fuerte de su equipo —el ataque— Diego Maradona ha conducido a Argentina a cuartos de final contra Alemania, a pesar de su falta de experiencia como técnico.

Por ROB HUGHES
Publicado el 2 de julio de 2010
JOHANESBURGO

Querido Diego: llegó la hora de que los críticos digamos perdón y gracias.

Juzgamos mal tu nombramiento como entrenador. Creíamos que Julio Grondona, el presidente de la Federación Argentina de Fútbol de 78 años, había perdido todo el sentido de la razón requiriendo, a un desdibujado icono sin medallas como técnico, para poner en relieve a un equipo nacional quebrado y conducirlo a través de esta Copa Mundial.

Bueno, ya hemos hablado bastante de la llamada experiencia.
Sea lo que sea que pase entre Argentina y Alemania en Cape Town el sábado, tu equipo ha sido la alegría de este torneo.

Has revigorizado una era demasiado cauta en este deporte. Tus jugadores —Lionel Messi, por supuesto y Carlos Tévez, Gonzalo Higuaín y otros— han desvanecido la inhibición

El talento es obvio, incluso para nosotros que fallamos sabiéndolo todo. El grupo de jugadores que heredaste estaba claramente desbalanceado. Tenés más delanteros de los que necesitás y muy pocos defensores de verdadera calidad.

Aún así, los más certificados entrenadores propondrían lo que Brasil hizo durante el curso del torneo —defender con gran cantidad de hombres y atacar sólo esporádicamente.

Pero Maradona no es así. Liberaste al equipo, consciente de sus fortalezas, ataque, ataque, ataque.

Y cuando le diste licencia la manera en que lo hiciste con Messi, Tévez y compañía, también nos liberaste. 

Cuando tu equipo hace trizas la precaución de los oponentes nos sentimos como chicos que quieren ser todos atacantes.

Tus saltos junto a la línea lo personifican.

No nos dejamos engañar, Diego, por el traje gris y los zapatos lustrados. Vemos a través del atuendo formal a un hombre reviviendo su juventud, a un hombre de 49 años que fue un genio desenfadado en 1986. Un hombre que fue a Alemania para la última Copa Mundial vestido con una camiseta, animado desde la tribuna.

Ese entusiasmo nos recuerda que el fútbol es un juego sencillo. Tu equipo tiene una habilidad superior atacando, por lo tanto hay que dejar que juegue con su naturaleza.

Suena, y se ve, tan obvio. Alemania representa un verdadero desafío, en especial para tu defensa. Aunque no estamos seguros de si te preocupás por alguna oposición. Cuanto más avanza tu equipo, más te acercás a despojar el mito y la mística de que conducir un equipo es una ciencia y que un director sólo puede tener éxito a través de años de estudio de un manual.

No te imagino leyendo ningún libro sobre cómo ser exitoso en tu juego. Habiendo estado en las calles de Villa Fiorito, el barrio pobre en el que creciste en las afueras de Buenos Aires, puedo entender que los libros son ridículos para vos.

Un manual escrito para marginados bajo ninguna circunstancia podría haberte sacado de ese lugar empobrecido, pero de alguna manera feliz. Tus destrezas lo hicieron. E incluso los ingleses que maldicen el gol de la Mano de Dios que metiste durante la Copa del Mundo de 1986, tienen que reconocer el genio con el que superaste a seis hombres para marcar un segundo gol en ese partido —el Gol del Siglo.

Genio, jugando con tus propias reglas.

A pesar de eso, cuando Grondona, el presidente de la Federación Argentina de Fútbol, antes de que nadie hubiera siquiera oído de Maradona, recurrió a vos como entrenador, todos quedamos dando vueltas.
¿Cómo podía funcionar? ¿Cómo podía un jugador que se había quemado por completo con drogas, alcohol y con una aparente imposibilidad de hacer frente a la vida más allá del silbato final, ser la guía y el mentor para jugadores que parecían perdidos y desilusionados por su propia federación nacional?

Los mejores críticos, hombres que habían llevado a Argentina a sus dos Copas Mundiales, temían por su país y por vos.

Muchos estuvieron de acuerdo con Daniel Arcucci, un columnista de La Nación, que escribió el año pasado, “Quizá Maradona está arriesgando demasiado, como siempre en su vida —incluso su status de mito.”
Arcucci no estaba solo en ese temor. Ninguno de nosotros imaginó lo que estamos viendo ahora.
La historia está marchando contra tu equipo hasta el final.

Lo sabés, pero probablemente no te preocupe, ya que sólo dos hombres han ganado la Copa Mundial como jugador y técnico. Mário Zagallo jugando para Brasil cuando triunfó en 1958, y cuando fue técnico en 1970. Franz Beckenbauer capitaneando a Alemania al título de 1974, y cuando fue su técnico en 1990.

Lo que estás intentando está más cerca de Beckenbauer que de Zagallo. Beckenbauer no tenía antecedente al costado de la cancha, ningún pedazo de papel que lo certificara como un entrenador probado y efectivo. En lugar de eso tenía, y tiene, el aura de su status de jugador vivo más grande de su país.

Zagallo era todo lo contrario. Un aplicado zaguero en su época, empapado del ethos del entrenador, intervino cuando la federación de Brasil despidió a João Saldanha semanas antes de la Copa Mundial.

Saldaña era de tu tipo, Diego. Amaba la irreverencia; ridiculizaba los estereotipos de entrenador. Dejaba jugar a los grandes jugadores. Compartía con ellos un amor de limitarse a ser lo mejor que un hombre podría ser.

Nos dijiste que tu mensaje para Messi fue simplemente que nadie nunca le dijo a Maradona donde jugar, por lo que vos no le dirías a Messi donde jugar, tampoco.

Interesante, porque pensábamos que podría haber fricción entre el hombre que ha sido el jugador argentino más mágico y el único hombre desde esa época que podría desafiar esa designación.

Si esa es otra equivocación, es momento de hacer mea culpa, y en serio.

domingo, 27 de junio de 2010

Las Abuelas, los editorialistas de La Nación y algunas reflexiones

Leemos en La Nación de ayer: "La postulación de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo al Premio Nobel de la Paz motiva algunas reflexiones". ¿Algunas reflexiones por parte de quién, sobre qué cosas en particular? ¿Quién se esconde detrás de una editorial anónima desde la tribuna de doctrina del diario mitrista? Porque que las cosas se naturalicen no significa que deban ser aceptadas sin más, con esa condescendencia que se suele tener con los que de tanto repetir, aburren y no hacen más que crear ruido blanco alrededor de un tema instalado.

La semana pasada la editorial giró en torno a la cuestión del matrimonio homosexual al que con un timing excelente Bruno Bimbi le contestó sin dejar lugar a dudas. Y hoy... hoy, bueno, según nuestro anónimo editorialista se bastarde la bandera de los Derechos Humanos y él no tiene otro remedio que salir a reivindicarla, eso sí encapuchado.

Parece ser que veintisiete años desde el regreso a la democracia no han hecho mella en los que siguen pensando en que la última dictadura cívico-militar fue una guerra, que mató a 30.000 personas, que se apropió de sus hijos y que le quitó la voz no sólo a una generación, sino a todos aquellos que hemos nacido después y que hemos perdido sus referencias. Quizá la frase de Shakespeare en Enrique IV "Nada es deshonesto para aquellos que ganan" venga muy a cuento y describa con descarada precisión en la encrucijada que estamos parados. ¿Decidiremos como el señor Aznar, meter el pasado bajo la alfombra y olvidar a los muertos donde están y dejar a los vivos que no saben hijos de quiénes son junto con sus apropiadores y cómplices de sus asesinos? 

"Estela de Carlotto está transitando activamente el mundo de la política y reclamando protagonismo." Claro, no es que Abuelas y Madres busquen a sus  nietos e hijos, zurdos que mejor están muertos que vivos (porque el único zurdo bueno es el zurdo muerto) sino que lo que quieren es un reconocimiento político, quieren apoderarse de este país, como no pudieron hacerlo sus hijos y destruir a la corporación mediática y a sus escribas que vomitan su verborragia desde el anonimato de palabras impresas con tinta manchada de sangre y que encima, pretenden que todos sus lectores somos estúpidos y perdonamos sus "pecados de juventud".



La funcionalidad a un gobierno que, por ejemplo, emplea casi permanentemente el pretexto de la defensa de los derechos humanos para intimidar a algunos medios de prensa puede terminar desacreditando el valor de muchas acciones de organizaciones civiles que, en su momento, se habían hecho merecedoras de un bien ganado prestigio.

"La participación política" que el cronista tolera tiene más que ver con la concepción "Susanita" del mundo. Para los que no son asiduos lectores de Quino, me explico. Charla entre Mafalda y Susanita (no es textual, puede fallar): "cuando sea grande voy a ser una señora importante y voy a hacer banquetes en los que vamos a servir lechón y pollo y cosas ricas, para juntar fideos, polenta y esas cosas que comen los pobres". Esa es la participación que les gustaría a los tribuneros mitristas que tuviera la señora de Carlotto. Una participación simbólica, para la foto, que hubiera aceptado comprar la sangre de su hija a un módico precio.

¿Por qué sigue usando el modal? ¿Por qué no se anima a decir lo que piensa sin el puede, sin el casi, sin los algunos, sin los debería o podría?

Un defensor de los derecho humanos no debe olvidar velar por los derechos individuales, pero tampoco debe ni puede olvidar que el negarle a la sociedad el saber la verdad es un delito que no se ampara detrás del "yo no quiero saber". "Todo argentino que aspire a un galardón internacional tan trascendente debería bregar por el reencuentro y la reconciliación de sus compatriotasalgo que difícilmente se logre si se apoya un tratamiento desigual por parte de la Justicia respecto de quienes estuvieron enfrentados en los años 70 y se consiente una manipulación de los derechos humanos al servicio de mezquindades políticas.". "Sería altamente positivo, para su propia organización y para la necesaria pacificación del país, que las integrantes de Abuelas de Plaza de Mayo no abrazaran una versión distorsionada de la verdad histórica"

LA VERDAD HISTÓRICA esa quimera a la que apelan los que nunca le han pasado siquiera por cerca al quehacer histórico. No es que la verdad histórica no exista, pero no con las mayúsculas que le gustaría a nuestro intrépido escriba, que a estas alturas me lo imagino a los gritos, intentando pacificar a un país crispado que empieza a sospechar que no hubo enfrentamientos en los años setenta, que no hubo una guerra civil, que empieza a pensar en "lo que hubiera pasado si..."
Aunque el "what if" sea una rama de la ciencia ficción especulativa, muchos pensamos, "¿qué hubiera pasado si adalides como el que nos convoca esta noche se hubieran animado a decir la mitad de las cosas que dicen hoy apelando a favor de una libertad de prensa amordazada, que hubiera pasado si hubieran dicho hace algunas cosas treinta años, y no ahora cuando la Patria se puede defender sola y los está llamando a rendir cuentas?"
¿O será que pretendemos la clase de reconciliación que denuncian estos actores en este excelente spot del Ministerio de Cultura Español?


martes, 22 de junio de 2010

Una entrevista a Pepito Cibrián, Diario Sur Digital

Pepe Cibrián Campoy: “Un homosexual puede ser un gran padre”

Cuenta que lo invitó a participar en la audiencia la senadora Negre de Alonso, una opositora al matrimonio gay, en un almuerzo con Mirtha Legrand. Dice que dudó, pero lo convenció un diputado socialista. “El día que salga esta ley, yo adopto”, asegura.
Por Soledad Vallejos
“Los señores estos dicen que ‘sólo papá y mamá’, dicen ‘antinatural’. Dicen que el matrimonio es para procrear y no piensan en que una señora lesbiana se puede inseminar, que un señor homosexual puede ser un gran padre”, critica Pepe Cibrián Campoy. Termina la semana y, aunque ha viajado al interior para dar un seminario, no puede ni quiere despegarse de los ecos que siguen escuchándose tras su intervención, el martes pasado, durante la primera de las audiencias públicas que el proyecto de ampliación del matrimonio civil tuvo en el Senado. Lo dijo ese día y lo repite en la conversación: “Hay parejas que quieren un hijo para darle amor. Eso es un matrimonio”. Por eso, continúa, “el día que salga esta ley, yo adopto con Santiago”.
“Mirá, sólo ayer recibí 416 mails en mi casilla”, cuenta. Lee fragmentos al azar: “Fuiste estandarte de una realidad inevitable”, “gracias por darnos voz a quienes tenemos otros modos de vida”... Todas esas palabras fueron enviadas por personas a quienes él jamás conoció y que, sin embargo, necesitaron contarle qué les pasó tras esos minutos durante los cuales él contó momentos de su vida personal y de pareja. Al comenzar esa reunión, Cibrián Campoy refirió cómo resignó su paternidad porque, en caso de adoptar, la ley dejaba potencialmente desprotegido a su posible hijo, a quien sólo reconocería un padre, y no dos. “Yo soy un hombre de perfil bajo en cuanto a lo social, lo íntimo. Nunca estuvo en tela de juicio mi sexualidad ni mi vida privada, pero como publiqué mi autobiografía y el título es lo que me dijo mi padre cuando le conté de mi sexualidad, será que tenía que hacer esto. Un día el Negro (González) Oro me tira ‘¿te casarías?’, y a partir de allí surgió este Pepe, que habla de sí con una dignidad que aprendí de mi padre.”
–¿Cómo se gestó su participación en la audiencia pública?
–En mayo, compartí una mesa en el programa de Mirtha Legrand. En ese almuerzo estaba la senadora Liliana Negre, que preside la comisión donde se debate ahora el proyecto. (NdR: en ese programa, del 13 de mayo, estuvieron, además, Roberto Piazza, Gabriel Rolón, Ricardo Cuccovillo y la diputada Cynthia Hotton.) Ella no está de acuerdo conmigo, pero en un acto de profunda amplitud me invitó a que fuera a exponer. Entonces... yo no sabía qué coño decir. Lo llamé al diputado Ricardo Cuccovillo, a quien había conocido también en ese almuerzo. “¿Quién habla?”, me dijo. “Pepe Cibrián Campoy”, le dije. Iba por la ruta, me dijo “dejame que pare”, y cuando paró le pregunté: “¿Qué hago? ¿Voy o no voy?”. Y él me dijo: “¿Cómo no vas a ir? Tenés una voz que la gente escucha. Te pido que estés”. Y fui. Yo le pedí que me acompañara, “necesito que me ayudes con tu energía”, le dije, y por eso él el martes estuvo en la audiencia el tiempo que yo hablé.
–¿Hablar en un ámbito tan diferente del habitual, sobre un tema tan personal y en un contexto político, le dio pánico escénico?
–Te juro por mamá que no. Me dio un orgullo profundo. Y no esperaba nunca que sucediera esto, pero sí creo que la sociedad está mucho más preparada de lo que algunos creen para dar la bienvenida a este cambio en la ley. Por eso mismo, porque se dan cuenta, creo que muchos senadores que antes no apoyaban ahora lo van a pensar. Algunos dicen que para (Julio) Cobos podría ser una disyuntiva en su momento, al llegar la votación, si los números están empatados. Si fuera así, yo le diría a Cobos que piense en lo mismo que le dije a (la diputada Cynthia) Hotton en ese almuerzo: “¿Qué es preferible? ¿Que haya un niño en la calle o que esté en mi casa, conmigo y mi pareja, Santiago, recibiendo amor y teniendo una familia?”. En este momento, yo sé que soy un señor que tiene que pelear por un ideal y el de muchos. Yo no tengo problemas: podría adoptar, tengo dinero para heredar y para que me hereden, mi familia no ningunea a Santiago y jamás le impedirían entrar al sanatorio si yo un día enfermo. Pero detrás de mí hay cientos de miles de personas que sí tienen problemas en todos esos sentidos. Hay todavía chicos que no se animan a decir a sus padres que son homosexuales. No fue mi caso.
–En la audiencia refirió una conversación con su padre.
–Mi padre era distante, muy tímido, muy reservado, discutíamos mucho. Esa noche habíamos discutido mucho, mi madre vino a mi cuarto muy enojada, le conté de mi sexualidad. Se quedó dura y dijo: “Vamos al cuarto de tu padre”. Fuimos al cuarto de papá, estaba leyendo un libro, porque era un gran lector. Y mamá le dice: “Tu hijo quiere hablar”. Ahí empecé a vomitar todo de nuevo. Con ternura, papá se sentó en la cama. Dijo: “No, Pepe, se es hombre en la vida, no en la cama. Te pido que seas como sos al ciento por ciento. Si no, no te respetaría”. Nunca más hablamos del tema. Me dio libertad de acción, de pensamiento, de ser humano. ¿Qué me pueden decir por la calle por decir quién soy? Ordinarieces. Que más me da. Pero cuando escucho a estas personas, como Valeria Mazza y demás, con las cosas que dicen (sobre la homosexualidad y las familias diversas), pienso que deberían pelear en todo caso más allá de la palabra: en lugar de hablar tanto de los niños que no tienen familias, ¿por qué no hacen algo para solucionarlo? Mi padre a los 18 años se enroló porque empezó la Guerra Civil Española. Peleó en el Ebro. ¿Qué pensaría mi padre ahora si me viera? No tengo dudas de que diría: “Ahí está mi hijo peleando por sus ideales con sus armas en la batalla”.
–Hasta ahora, a pesar de tener años de cierta exposición pública, siempre resguardó su vida privada y la de su pareja.
–Sí, pero Santiago me entendió que yo necesitara hacer esto. El me apoya. No se saca fotos porque no es mi intención hacer un show de la pareja. El es arquitecto, y estaba en el Senado. Estuvo sentado entre la gente, al fondo. Me acompaña en esto. Sabe que desde ese día doy notas, digo que sí a todos. Con que una sola persona cambie de opinión es suficiente. Si vamos sumando uno de los tantos, todos los que vamos hablando, puede cambiar una ciudad, un país, una mentalidad. A lo mejor la de los senadores. El día que todo esto termine, y espero que termine para bien, no me vas a escuchar hablar más del tema.

viernes, 18 de junio de 2010

La contagiosa homosexulidad (II)

Tela para cortar, nos sobra... por eso voy a contribuir con mi tijera de sentido común (al menos el que a veces tengo), con el filo de quien escribe cuando tiene algo que expresar y cuando no también, con el mango bien agarrado de quien se indigna tanto consigo misma como con los demás, y con la libertad de expresión que me otorgan mis compañeros y algo que no deberíamos olvidar en estos tiempos: la democracia ensangrentada. Porque es un estado político, una institución que nos costó demasiado como para darse el lujo de andar diciendo por ahí que no tenemos libertad de prensa, etcétera. Ya sé, me fui de tema... aunque no estoy tan segura. Porque si legisladores como Chiche Duhalde, sectores de la Iglesia Católica, simples ciudadanos que saludamos todos los días pueden decir atrocidades, es que censura no hay.
Lo atroz no es pensar diferente, lo atroz es asumir como verdades consolidadas y probadas cosas que -aunque no les guste a mucho no son tales verdades- por ejemplo esa terrible afirmación de que no existió el Holocausto. Nada lejano a afirmar que la homosexualidad es una enfermedad. Podemos retorcernos de rabia escuchando a neonazis y antijudíos decir que Hitler se quedó corto, podemos mordernos la bronca escuchando a personas decir que no apoyan la homosexualidad, principalmente porque nadie puede pedir apoyo para algo que es mucho más que una causa y una bandera multicolor. Pero no podemos quedarnos callados ante la infamia. La negación de la historia es muhco más grave que ser de derecha o de izquierda. La negación del otro, que se esconde en la homofobia, es mucho más grave que decir "puto de mierda". Es doloroso, indignante, hasta repugnante que los seres humanos vayamos tras la superficie. Voy a ver si me explico bien: suponer que la homosexualidad es una enfermedad, suponer que con el matrimonio gay se degenera la familia, suponer, creer y estar absolutamente convencidos del mal que se le hace al mundo... pero no mirar hacia adentro, no mirarnos como hombres y mujeres que tenemos una vida, que somos otra cosa, somo un todo con sueños, miserias, ilusiones, decepciones, trabajos, estudios, desocupaciones, etc. Alguien le preguntaría a un heterosexual ¿por qué sos hetero? alguien le preguntaría a un padre heterosexual ¿por qué crió un hijo gay? no creo, ¿no?
Como dije, hay tanta tela para cortar, tantas preguntas ante insólitas voces que pregonan que la única vida perfecta es la de la familia "como Dios manda". Que yo recuerde, Dios manda amar, eso es lo que me enseñaron por años en una escuela católica y eso es lo que me enseña la religión que he elegido como compañía espiritual cuando fui creciendo. A esas personas que creen que Dios manda determinadas cosas, les cuento (y también para esa gente que sigue creyendo que los judíos son el mal de este mundo -y no hablo del Estado de Israel) que en el 2006 la religión ortodoxa judía declaró que la homosexualidad no es ninguna enfermedad y que abiertamente hay rabinos homosexuales, además, contempla el casamiento entre personas del mismo sexo. 
Pero, si me permiten, la cosa no viene de un solo lado. El otro día escuché por radio hablar a una chica, cuyo nombre no registré, que "al hablar de matrimonio gay no olvidemos que hablamos de amor, no sólo de cuestiones hereditarias" y me gustó que hiciera hincapié en eso. "Será que hablar de sentimientos es cosa de reaccionarios?" se preguntó una vez Ernesto Sábato. Que salga la nueva ley de matrimonio civil no va a cambiar el pensamiento arraigado de generaciones y generaciones, no va a hacer que los vecinos del registro civil salgan a aplaudir y tirar arroz, pero formará parte de una contribución a la solidez de la democracia, de la libertad (que aunque siempre restringida porque estamos en un sistema capitalista, estamos en democracia). 
Ser homosexual no es una bandera, una forma de vida, una música disco de los setenta, una postura forzada y buscada para demostrar que se es diferente. Ser homosexual es como ser heterosexual, la diferencia es que "Juan en vez de enamorarse de María se enamora de Pedro, y María se enamora de Juana". Todo lo demás son los mismos problemas que cualquiera tiene en la vida. Y si pensamos seriamente, todos sufrimos discriminaciones. ¿Qué nos pasa raza humana? suponiendo que fuese una enfermedad (y está más que claro que no lo es) qué tendría de malo, o qué, tengo que pensar que discrimimanos a las personas que tienen problemas de salud. Y, me dirán ustedes, acordate de Graciela Alfano. Por ejemplo.
Ahora bien, lo profundo no se mira. Un padre, tío, primo, tutor o encargado abusador o violador no se mira, un cura pederasta no se mira, los consumidores de pornografía infantil y de mujeres esclavas de la trata no se miran, porque seguramente son los hombres que constituyeron familias como dios manda. Los padres y madres que maltratan a sus hijos no se miran. Los heteros y gays que no se casan por amor, no se miran. 
Creo que la cosa puede cambiar el día que nos miremos todos como seres humanos, mujeres y hombres y quienes eligen ser diferentes aunque ni yo los entienda. Los que nacen Roberto y quieren llamarse Sofía... absolutamente todos, bien diferentes entre sí, somos iguales. Ese día llegará cuando ya no nos pregunten si somos homosexuales, llegará el día que nos preguntes simplemente si estamos enamoradas/os, llegará el día que no nos tengamos que definir por nuestra sexualidad. Me quedo, y los dejo de molestar por fin con la frase de "Agrado" en Todo sobre mi madre: "una es más auténtica cuanto más se acerca a lo que soñó de sí misma."

Noelia 

La contagiosa homosexualidad

Anoche, un amigo enviaba un mail con un posteo tomado del blog de Artemio López (ramble tamble) que a su vez venía de la Agrupación Nacional de Putos Peronistas en el que se denunciaba que en una escuela bonaerense se enseñaba la homosexualidad como una enfermedad.

La escuela laica, privada y que es conocida como Escuela Modelo de Bella Vista (lo del modelo, es triste) tiene en su staff a una docente de Educación para la Salud que reparte como material de cátedra unos cuadernillos, que sin citar fuente ni procedencia, funcionan de guías para introducir en el tema de la homosexualidad a sus alumnos de Polimodal

La lección 32 del material de Educación para la Salud, cuyo tema es la Homosexualidad, describe como uno de los objetivos de la cursada que el alumno identifique a la homosexualidad como una enfermedad” y que la rechace como desviación”, entre otras apreciaciones en éste mismo sentido.
En 1961 Sidney Davis, director y productor de "películas de guía social" lanzó Boys, Beware!. El "Social guidance films" es un género nacido entre los años 50 y 70 cuyo objetivo es crear material filmográfico para ser utilizado en las aulas de las escuelas norteamericanas.

En este video en particular, producido en cooperación con el Departamento de Policía de Inglewood, California, la homosexualidad no sólo es una enfermedad contagiosa, sino que además está asociada a la pedofilia y al homicidio. La advertencia final dice "Nunca se sabe cuando puedes encontrar a un homosexual. Puede parecer normal, pero está mentalmente enfermo".

Acá versión subtitulada (porque quien lo posteó impide la incrustación del video)



Y la única manera de detenerlo es denunciarlo e impedirle todo contacto con el resto de la sociedad, muy en consonancia con las directivas del texto que circula entre los alumnos de nuestra escuela en cuestión que dice “(…) es legítimo, y no es discriminación, impedir que homosexuales adopten niños, o ejerzan ciertos empleos: profesores de educación física, instructores militares, directores de campamentos, etc. En eso se debe proceder igual que cuando no se autoriza que una maestra o un alumno con enfermedad contagiosa concurra al colegio (…)”.

Leído el posteo, visto el video y escuchadas las declaraciones de la Senadora Chiche Dualde que asegura que un hijo gay es un problema (no acalara para quién, pero lo imaginamos) no me queda otro remedio que preguntarme si de verdad estamos en el siglo XXI o simplemente en algún momento me levanté en un universo paralelo, casi idéntico al de siempre, pero al que le falta algo: el pensamiento racional y la necesidad de una integración real y plena de los individuos. 

¿O será que estamos pidiendo demasiado cuando reclamamos que hacernos cargos de nuestros actos y de nuestras palabras es comprometernos con nuestro futuro? De otro modo tendría que desconfiar de mi profesor de Historia Contemporánea cuando, con ironía nos dice: después de muerto Hitler no quedó un sólo nazi, y todos los alemanes fueron felices.

Porque que una "profesora" reparta entre sus alumnos material de este tipo, que nos retrotae cincuenta años en los logros de las luchas por los derechos individuales hace perder la paciencia a cualquiera. Y no sólo la paciencia, sino la confianza y la esperanza de que la educación sea la única manera de hacer libre a los pueblos. Dirán que soy injusta, que por una docente que no se toma en serio su trabajo hay miles que sí lo hacen. Y tienen razón, pero esos miles no podrán remediar el daño que uno sólo puede hacer. Lo positivio es que el hecho se conoce y los padres no se han quedado pasivos ante el acontecimiento.

Y si todavía tienen ganas de leer algo realmente interesante pásense por el blog de Bruno Bimbi y vean el súper posteo sobre matrimonio gay, para los que nos gusta discutir pero a veces no sólo nos falta la paciencia sino también herramientas más contundentes que una silla para hacerlo.
  

miércoles, 16 de junio de 2010

Hoy, en Página 12

ENCUENTRAN EN SANTA FE UNA FOSA COMUN CON POSIBLES RESTOS DE DESAPARECIDOS

Por primera vez en un predio del Ejército


El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) encontró la semana pasada en Santa Fe una fosa común con restos humanos, que podrían pertenecer a personas desaparecidas durante la última dictadura. El hallazgo se produjo en un campo del Ejército ubicado en la zona de San Pedro, localidad cercana a Laguna Paiva, a cincuenta kilómetros de la capital provincial. El juzgado federal 2 de Santa Fe y el propio EAAF precisaron que los restos estaban “cubiertos de cal y con evidencia balística asociada a los mismos”, dato que permite inducir que allí mismo se habrían realizado las ejecuciones. “Este hallazgo deja en evidencia el accionar de otra metodología, sin precedentes hasta ahora, del terrorismo de Estado”, agrega el informe. También destaca que “es la primera vez que se localizan inhumaciones clandestinas en un predio perteneciente al Ejército”.
El trabajo de los antropólogos en el sur de Santa Fe comenzó en 2007, en el marco de una causa judicial impulsada por organismos y por la Casa de los Derechos Humanos de la provincia. Hasta septiembre pasado, cuando el antropólogo Juan Nobile presentó ante el Tribunal Oral Federal 1 un informe detallado sobre ejecuciones, exhumaciones e identificaciones en el sur de Santa Fe, “Campo San Pedro” figuraba entre los predios en los cuales se habían realizados excavaciones con resultados negativos.
La primera denuncia sobre enterramientos en “Campo San Pedro”, que tiene más de cien hectáreas, data de 1984 y se realizó ante la Comisión Nacional de Desaparición de Personas (Conadep). Reiteró y amplió el dato el año pasado el ahora condenado Eduardo “Tucu” Constanzo, personal civil de inteligencia del Ejército. “Hubo veintisiete detenidos políticos que, me comentaron, fueron trasladados al campo que tenía el coronel Juan Orlando Rolón (ex jefe del área militar 212, fallecido) en la zona de Laguna Paiva. Ahí los enterraron”, declaró Constanzo en septiembre. El dato se lo transmitió al ex agente de policía ya fallecido Hugo Cardozo. “Vino a mi casa y me dijo que a esos 27 los llevaron a la estancia de Rolón”, dijo Constanzo. “Hasta que no se produzca una identificación de los restos no vamos a saber si esto es así o no. Si se identifica a una de las personas del traslado del que habló Constanzo y es una de esas personas que trasladaron desde La Calamita, ahí estaríamos aportando una prueba científica para fundar el testimonio”, explicó ayer Miguel Nieva, del EAAF.
Luego de dos años de “excavaciones, relevamiento del terreno y análisis de distintas fuentes documentales, y como resultado del plan de trabajo continuo y sistemático de exploración intensiva realizado en un predio de más de cien hectáreas por el Equipo Argentino de Antropología Forense, el miércoles 9 de junio se produjo el hallazgo de una fosa común, en cuyo interior se hallaron restos humanos de varias personas, cubiertos con cal y evidencia balística asociada a los mismos”, precisa el informe.
Según el documento incorporado a la causa por el EAAF, con las firmas de los antropólogos Nobile y Nieva, luego de encontrar “manchas blancas” de óxido de calcio (léase cal) se procedió a excavar con técnicas de arqueología y se encontraron “restos de miembros inferiores (fémur, rótula, tibia, peroné, calcáneo y astrágalo) correspondientes a una persona adulta joven”, dato que permite concluir que “se ha producido al menos una inhumación clandestina de restos humanos”.
El informe del juzgado y del EAAF indica que “se han iniciado las tareas tendientes a lograr la identificación de los restos encontrados, sin perjuicio de lo cual cabe señalar que el hallazgo mencionado no da por terminadas las tareas de prospección y búsqueda, restando todavía explorar una gran superficie del terreno”. Las tareas de los antropólogos “se llevan adelante gracias al apoyo de la Corte Suprema de Justicia, el Consejo de la Magistratura y el Juzgado Federal 2”, destaca el documento, y agrega que “también fue indispensable el apoyo de organismos de derechos humanos (Asociación para la Reconstrucción Histórica Argentina, entre otros) y la valiosa colaboración de personas que aportaron, desinteresadamente, datos que nos llevaron a cumplir con los objetivos de esta investigación”.

Nota de Noelia: una rara esperanza (digo rara porque la palabra tan bienvenida como es "esperanza" parece no brillar ante estas realidades históricas) corre por mi mañana, tal vez la justicia llega tarde, lenta, incompleta, pero llega... tengo la esperanza de que algún día esto pueda suceder en Mar del Plata, mis compañeros de blog saben de mi locura de haber soñado que acá hay fosas comunes, pero, queridos lectores, no es inguna locura en vista de todo lo que hicieron desde el terrorismo de Estado... me parece, o me levanté muy determinista?

ABUELAS DE PLAZA DE MAYO

Los incorregibles lo seremos pero apoyamos a Abuelas de Plaza de Mayo en su candidatura al Nobel de la Paz, por eso compartimos el link donde ud., desprevenido lector, sin nada mejor que hacer, puede dejar su granito de arena y ser parte de la historia, firmando.

No me digan que les da prurito dejar su correo en cualquier parte. Bart Simpson diría, "qué delicado si se la pasa comiendo bichos". Yo les diría "qué delicados" si nos la pasamos posteando cualquier cosa en los muros de cualquiera en Facebook.

Bombas en la Plaza: el Golpe a Perón 1955

Como mis compañeros de Blog no leen este tipo de cosas o si lo hacen no lo admiten voy a permitirme postear un fragmente de un libro recién salido del horno que se llama El otro Bicentenario. 200 Hechos que no hicieron Patria, de los periodistas Gustavo NG, Néstor Restivo y Camilo Sánchez.

Así que en este nuevo 16 de junio seguramente menos frío va el homenaje, ¡qué tanto!

El capitán de navío Paco Manrique, futuro político y defensor de jubilados, no lograba sublevar la Base Naval de Puerto Belgrano, pero otros militares sí consiguieron adhesión y salieron a matar a Perón. Al mediodía cayeron sobre Plaza de Mayo 14 toneladas de explosivos. Aquel frío 16 de junio de 1955 el "Pocho" no murió, sí unos trescientos transeúntes civiles y algunos soldados. Quedaron también cientos de mutilados. El peronismo había llegado a lograr para los obreros 53% del ingreso nacional, los empresarios no querían ceder más, la Iglesia estaba alterada por la Ley de Divorcio y la eliminación de la obligatoriedad de enseñanza religiosa en las escuelas y tampoco las potencias extranjeras simpatizaban con el gobierno elegido por 64% de los argentinos y, por primera vez, las argentinas.


El 11 de junio, día de Corpus Christi, una multitud había protestado; curiosamente, los partidos de izquierda iban cerca de la cruz. el 16, cientos de militares se levantaron, entre ellos un capitán de fragata responsable de miles de asesinatos años después y un teniente que habría de especializarse en autoistas: Emilio Massera y Osvaldo Cacciatore. También civiles como el radical Miguel Ángel Zavala Ortiz, futuro canciller. Fracasada su misión, fugaron a Montevideo y allí los recibió el teniente Guillermo Suárez Mason, otro futuro asesino, entonces asilado en Uruguay. Dijo Clarín: "Las palabras no alcanza a traducir en su exacta medida el dolor y la indignación que provocaron en el ánimo del pueblo la criminal agresión perpetrada por los aviadores sediciosos que ayer bombardearon y ametrallaron la ciudad".

Perón llamó a la calma pero el 31 de agosto ofreció su dimisión y la CGT se la rechazó con una masiva concentración en la Plaza de Mayo. Allí el General cambió el tono: "Por cada uno de los nuestros que caiga, caerán cinco de ellos".

Dos décadas más tarde, miles de muchachos peronistas corearían: "¡Cinco por uno,/no va a quedar ninguno".

Por la noche del 16, mientras sonaban las últimas metrallas contra el Departamento de Policía y la Plaza de Mayo, grupos peronistas incendiaron casi todas las iglesias del microcentro. Una corte militar (la primera vez que ocurría) condenó a dos oficiales por la masacre: al contraalmirante Samuel Toranzo Calderón y al capitán de corbeta Fernando Suáres Rodríguez. Los liberaría poco después, hacindo honor a su nombre, la "Libertadora". Recibieron, de yapa, bonitos destinos diplomáticos. (pp. 137-138)